Ya me harté de tantas diarreicas oraciones a nadie,
tan solo mi conciencia arrodillada escucha
para luego humillarme.
No hay peor predador que uno mismo.
Quiero abominar la fe de los errantes
vaciarme de biblias sangrientas
y otros mitos devoradores de cerebros.
Vaciar mis pulmones de tanta civilización
antes que la bestia arrime a socavar mi esencia.
Hasta dios se ha jubilado por la fe que lo empecina.
Vicius Clem
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario