viernes, 2 de febrero de 2007

Si la cosa va joya, avanti con la argolla

Las mujeres de mi especie, a cierta edad, necesitan sentirse amenazadas por carne fresca para mantenerse algo putas (lèase atractivas). Si no tienen competencia, los mùsculos aflojan, el culo cae inexorable y las amigas màs frecuentes son las arrugas.
Por suerte existe toda una maquinaria para resucitar esa anatomìa laxa y convertirla en escultura eròtica.
Es un requisito del mercado: una mujer asexuada (o anticlimax) no interesa porque no vende.
Por eso mis queridas, otrora gatas infernales, no pierdan las formas y que Alà las ilumine con orgasmos azules.

Victor Clementi

1 comentario:

Gabriela dijo...

Las mujeres de su especie y también los hombres (Agregue),nada mejor para un veterano(45 años para arriba)sentirse viril y bien macho cuando una de 30 y pico le dá rienda y hace fantasear a su pene.
Por eso gente de la especie, no importa si se te caen las carnes, o el pene rinde para una erección, sin mirar que piel o arruga, avanti con el sexo y mézclelo con amor.